Mostrando entradas con la etiqueta desamor. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta desamor. Mostrar todas las entradas

lunes, 7 de enero de 2013

Hace tiempo...

Hace tiempo que voy dando tumbos. Hace tiempo que noto que me estoy chocando una y otra vez contra una pared, hace tiempo que sé que hay una puerta abierta ahí, en algún lado, pero me faltan el valor y las ganas para seguir adelante sin mirar atrás. Hace tiempo que siento que ya no soy esa persona que era contigo, hace tiempo que me cuesta sonreír. Hace tiempo que supe que todo esto iba a doler como un cuchillo en el corazón. Pero supongo que sabréis lo que pasa. No me gustan los analgésicos, ni las pastillas, ni los comprimidos, ni nada que no se parezca al remolino en su pelo y la oscuridad de sus ojos. Por eso voy de lado a lado de este callejón sin luz, dándome cuenta por las noches de que tengo que mirar al frente en vez de buscar desesperadamente un retrovisor y perdiendo la armadura por las mañanas desde que no me preguntas qué tal he dormido. Y lo peor es que no tiene salida, y lo peor es que por intentar conservarte no hago más que hacerme daño, no hago más que impedirme a mí misma avanzar. Y sí, también intento meterme en la cabeza eso de que hay que olvidar lo que uno siente y recordar lo que uno merece, pero cuanto más lo pienso más me hundo. ¿Cómo voy a olvidar tu risa cuando decías mi nombre? ¿Cómo voy a olvidar esa sonrisa que intentabas ocultarte, esa que solo provocaba yo? ¿Cómo voy a olvidar cada una de esas historias sin pies ni cabeza con las que conseguías que me riera en la cara de los problemas? ¿Cómo voy a olvidar que fuiste la persona que más me marcó, la que consiguió, a fuerza de peleas, discusiones y reconciliaciones, ser una pieza fundamental para mí? ¿Cómo voy a conseguir olvidarte, si tengo todos tus gestos más interiorizados que lo míos incluso? ¿Cómo voy a conseguir olvidarte si me sigo sorprendiendo a mí misma pensando que seguro que tal cosa u otra te va a hacer gracia, cuando sé perfectamente que ni siquiera me voy a atrever a hablarte? ¿Cómo voy a conseguir olvidarte cuando ni yo tengo claro si es mejor para mí intentar salvarnos de nuevo o nadar a contracorriente fuera de todo esto?

viernes, 2 de marzo de 2012

Entonces llegó ese día...

El día en que me di cuenta de que nunca había aprendido a bailar bajo la lluvia. Así que la mezclé con whisky y algo de ron, que ya sabes que siempre me gustó más y me la bebí de un trago. Haciendo desaparecer cada vez que no te dije que te quería. Aunque eso ya da igual. Porque, al fin y al cabo, si hubiéramos sido tan especiales, no lo habríamos echado a perder así. Habrá que admitir que no fuimos nada de otro mundo, que lo que merece la pena, permanece en el tiempo pero nosotros, nosotros nos hundimos con la primera ola que vino en contra. Ya no sé si nos estoy subestimando o poniéndonos por primera vez en nuestro lugar, la verdad es que duele igual de todas formas. Que tú nunca me necesitaste realmente y ahí fue donde comenzó nuestro problema. Que nos llevábamos bien, sí, quizá demasiado, pero nunca te llené del todo.Y si después de todo este tiempo, no he conseguido hacerme indispensable, es que ya no lo seré jamás. Que nos quedamos a un paso de ser almas gemelas, pero esa distancia ya es insalvable.

Así que si vuelves un día a buscarme, porque te acuerdes de mi voz tal vez, me verás aquí, recogiendo esta lluvia que no deja de caer. Hasta entonces, sé feliz, por ti, por mí, por los dos, por todas las veces que creímos que era posible.

domingo, 15 de enero de 2012

Dime que no me quieres

Dime que no me echas de menos. Prométeme que eres capaz de estar a mi lado y no abrazarme, apuéstame lo que quieras a que si pongo a 3 cm mi boca de la tuya, no tienes que apretar fuerte los puños para no darme un beso. Grítame que puedes leer los más de mil mensajes que te mandé diciéndote que me encantabas. Dime mirándome a los ojos que no somos compatibles y dame un porque convincente. Júrame por lo que más quieras que no me quieres, y entonces me marcharé de tu vida para siempre. 
Pero todavía no lo has hecho, así que aquí estaré por si decides volver. Aunque quizás algún día sea demasiado tarde y decida no volver yo...




domingo, 8 de enero de 2012

Mientras que tú no la quieres...

Aunque tú no le hables, otros se mueren porque ella les conteste.
Mientras tú no quieres salir con ella, otros hacen lo que sea, para que ella acepte su propuesta.
Mientras tú no la valoras, otro la hace sentir la mejor mujer del mundo.
Mientras tú no la escuchas, otro le aconseja, sabe de sus problemas y la entiende.
Mientras tú no quieres una foto con ella, otro se muere por una foto de ella.
Mientras tú la haces llorar, otro la hace reír.
Mientras tú estás con niñas, otros le dicen que hay mejores.
Mientras tu desprecias sus regalos, otros hacen lo que sea porque ella acepte lo de ellos.
Mientras tú le dices adiós, otros quince le dicen “hola guapa”.







Entradas populares